Hay tantas personas detrás, al lado, arriba y delante de mí, que no tengo palabras suficientes para agradecer todo lo que me han dado.

Gracias a mis padres, por darme la vida, las experiencias y el apoyo que he necesitado para mi evolución. Gracias a mis ancestros por dejarme el legado que hoy llevo para aprender y crecer.

Gracias a mi hermano Miguel por su comprensión, compañía y amistad. Es un tesoro incalculable.

Gracias a Espai Lúdic, a mis terapeutas y profesores: Quim, Ángels, Ferran, Nela y Charo. Todo el amor que me habéis dado, lo guardo en mi corazón y lo expando hacia el mundo.

Gracias a Iván, mi marido y compañero de vida. Gracias por tu amor, tu comprensión y apoyo. 

Gracias a mis amigos, mi familia del alma. Por ser y estar.

Gracias a Tobías por amarme tanto incondicionalmente.

Gracias a mis alumnos y clientes. Por confiarme vuestros temores y secretos. Por dejarme acompañaros. Es una bendición y honor para mí.

Gracias a todas las personas que han pasado por mi vida.

Gracias a mis Maestros espirituales: Morgana, Brighid, Isis, Hestia, Jesús, madre María, Arcángel Miguel y Merlín. Gracias porque me habéis dado el apoyo espiritual que necesitaba para que la vida tenga sentido.

Gracias querido Moojibaba por estar en mi vida. No tengo palabras suficientes para agradecer tu presencia en este mundo.

Gracias a otros Maestros de camino: Yolanda Ruiz, Pablo González, Cristina Escalada, Eva Sánchez, Sandra Román, Brigitte Champetier de Ribes, Nuria Romaguera, Marianna La Loba, Isabeau Luna, Jay Burrell, Caroline Todd, Óscar Boule, Mónica Salas, Inés María Martín. 

Gracias